¿Por qué tengo que estudiar? Es una pregunta que muchos alumnos se hacen, habida cuenta de que para ellos el currículum escolar es una acumulación de datos sin sentido que “les obligan” a retener en la memoria, el suficiente tiempo para rendir en un examen.Para un gran porcentaje de alumnos, es aburrido estudiar,supone utilizar tiempo que podrían emplear en otras actividades más placenteras _incluyendo tanto el que pasan en la escuela o instituto como en casa haciendo las tareas o repasando_ y no le ven utilidad práctica más allá de aprobar los exámenes para no disgustar a sus padres.
Desafortunadamente, el concepto de aprendizaje tradicional, basado en la escuela conductista, donde lo más importante es qué y cuánto se aprende,fomentando modelos de enseñanza-aprendizaje pasivos, ha contribuido significativamente a esta desgana intelectual.
La ventaja es que cada vez más educadores y proyectos educativos, apuestan por la orientación cognitivista, que tiene en cuenta prioritariamente el proceso de formación de conceptos y el desarrollo de competencias o habilidades que ponen en marcha lo aprendido. Este enfoque teórico presta más atención a cómo y para qué se aprende, fomentando modelos de enseñanza-aprendizaje activos y experienciales.
Desde este último punto de vista,podemos estimular la motivación de
aquellos alumnos que no tienen un componente intrínseco _es decir, que su motivación no nace de dentro, de la curiosidad natural_ asociando la necesidad de estudio a utilidades y actividades prácticas que formen parte de su mundo inmediato o a medio plazo.
Una de las utilidades más claras del estudio, es prepararse para la vida laboral.Sin embargo, a los alumnos les cuesta ver esta utilidad, ya que lo asocian con la obtención de un título universitario, que “al final no sirve para nada, porque nadie trabaja en aquello para lo que estudió”.Pues bien, podemos hacerles que ver que el estudio eficaz desarrolla una serie de habilidades, técnicas y estrategias que nos van a servir, y mucho, en la vida laboral:
*Desarrollando un hábito y método riguroso de estudio, adquirimos procedimientos (analizar, sintetizar,esquematizar,realizar cuadros, gráficas, resúmenes,etc.) imprescindibles para casi todos los trabajos (tendremos que elaborar informes, interpretar datos, organizar distintas tareas, extraer conclusiones para la toma de decisiones,etc.)
*Un estudio eficaz supone conocimiento de sí mismo, un conocimiento que nos ha de servir en la etapa prelaboral para escoger con mayor certeza nuestro camino, es decir, tener claro “para qué servimos” y así asegurarnos una objetivo claro que nos reporte mayor satisfacción profesional.
*La habilidad de organizar adecuadamente el lugar y el tiempo de estudio, es muy útil para en un futuro saber organizar eficazmente el espacio y el tiempo de trabajo y así ser más productivo, es decir, obtener mejores resultados en menor tiempo, cualidad muy valorada por los empresarios.
*El estudio sistemático y constante ejercita y desarrolla las capacidades de memoria, atención, concentración y competencia lectora y ortográfica. Estos atributos son esenciales para superar una entrevista de trabajo, un proceso selectivo, una oposición, exámenes diversos como el carnet de conducir,etc…y posteriormente para promocionar (ascender) en el trabajo,al destacar por ellas.
*Las competencias técnicas que nos ayudan ahora a aprender, como: la consulta eficaz en internet o en diccionarios y enciclopedias; la elaboración de trabajos escritos; el desarrollo de exposiciones orales; la exposición de información gráfica, etc., son imprescindibles en el mundo laboral, ya que normalmente en éste hay que: buscar información, realizar proyectos, saber comunicar por escrito tanto lo que deseamos como la respuesta a lo que nos piden, mantener registros de información, saber hablar en público,etc.
Teniendo en cuenta estas equivalencias entre la labor del estudiante y el mundo profesional, es posible que logremos aumentar la predisposición del estudiante a encontrar otras muchas y a cultivar una “higiene del estudio”correcta.
Las técnicas para un estudio eficaz también se aprenden.Si consideras que tu hij@ no es eficaz estudiando, recurre a profesionales que le elaboren un plan a medida de desarrollo en este área, ya que no todos los alumnos tienen un estilo de aprendizaje por igual.